Aunque ya tuvimos la oportunidad de probar a fondo los neumáticos M+S en nuestra «Comparativa en la nieve«, ahora en las instalaciones del INTA en Madrid hemos podido comparar neumáticos convencionales y de invierno sobre asfalto seco, agua y nieve. Los resultados nos han sorprendido al demostrar ampliamente los neumáticos de invierno su mejor agarre en todas las superficies. En la prueba, que se realizó a unos 12 grados de temperatura del aire, vimos que tan sólo en asfalto seco los convencionales respondían igual que los de invierno. Además de la opción más segura para conducir en los meses más fríos del año, los neumáticos de invierno también son una alternativa legal a las cadenas para circular sobre nieve. Se acabó eso de montar unas complicadas cadenas de rodillas en la nieve y en un arcén con coches patinando a tu alrededor.
Los neumáticos juegan un papel fundamental en la seguridad de los vehículos. Y la importancia de los neumáticos cuando llega el invierno y las bajas temperaturas es todavía mayor. Por ello, con el objetivo de fomentar la seguridad vial en las carreteras, disminuir el número de víctimas en accidentes de tráfico y asegurar la movilidad, la DGT y los fabricantes de neumáticos aconsejan el montaje de neumáticos de invierno durante los meses de climatología adversa.
Este tipo de neumáticos, gracias a los compuestos con los que están fabricados y al diseño de su banda de rodadura, superan en mucho la eficacia de los neumáticos estándar cuando la temperatura es inferior a los 7ºC, ya sea sobre carreteras secas, mojadas, heladas, con barro o con nieve. Un neumático de invierno ofrece mejor capacidad para iniciar el movimiento de un vehículo (tracción), mantener la trayectoria (adherencia) o detener el movimiento (frenada) que un neumático estándar no sólo con asfalto seco y temperaturas bajas, también cuando la carretera está húmeda, cuando llueve, o cuando en la calzada hay hielo o nieve. Para ello, estos neumáticos se distinguen principalmente por tres características:
El dibujo de la banda de rodamiento es más recortado y más profundo para garantizar la máxima capacidad de evacuación de agua y una motricidad superior ante condiciones adversas.
Todos los neumáticos tienen laminillas en los tacos pero los neumáticos de invierno tienen una cantidad de laminillas entre 6 y 8 veces superior a las de un neumático estándar. Estas laminillas son las responsables de conseguir la adherencia óptima con el firme mojado, helado o nevado.
En un neumático estándar el compuesto de goma se endurece por debajo de los 7ºC y pierde sus propiedades. Esto no sucede con los neumáticos de invierno, que utilizan un compuesto más blando y más flexible gracias a un mayor contenido de sílice.
Las ventajas de los neumáticos de invierno frente a los de verano en temporada invernal son una mejor capacidad de tracción en cualquier situación, reducción del riesgo de aquaplaning, superior capacidad de frenada, posibilidad de circular sobre nieve (innecesario el uso de cadenas) y una mayor seguridad sobre hielo o nieve que con el uso de cadenas.
Se plantean dos preguntas con estos neumáticos: ¿cuál es la época adecuada para montar neumáticos de invierno?. Lo recomendable es utilizarlos en el período que va de noviembre a marzo, coincidiendo con el cambio de hora legal. Conviene tener en cuenta que la cifra de los 7°C representa un umbral de precaución, pues con una temperatura ambiente de 7°C, la temperatura del asfalto puede ser considerablemente más baja.
¿Puedo utilizar los neumáticos de invierno en verano? Todos los neumáticos, sea cual sea su período de uso, están certificados según la normativa vigente y garantizan la seguridad de utilización. Así, un neumático de verano puede utilizarse en invierno (salvo en carreteras nevadas en las que las Autoridades encargadas del tráfico determinen que es necesario el uso de cadenas o neumáticos especiales), y un neumático de invierno es válido en verano. Sin embargo, para la máxima seguridad y las mejores prestaciones, lo recomendable es utilizar los neumáticos que consiguen el mejor rendimiento en cada temporada.
Si compras neumáticos de invierno debes recordar que van marcados en el lateral con las letras M+S (del ingles barro y nieve). Si un agente de tráfico te para y te obliga a montar cadenas, solo tendrás que decirle que a ti no te hacen falta.