Toca la prueba de la Storm y estéticamente lo primero que nos llama la atención es el gran tamaño de la moto, su color negro mate, el doble faro delantero y su manillar recto. Una vez nos montamos en ella la sensación es de poder; tienes moto por todos los lados, con 2.340 mm de largo y un manillar de 880 mm. Tras conseguir levantar sus 340 kg., algo a tener en cuenta a la hora de maniobrar en parado, la postura es cómoda aunque su recto manillar te obliga a echarte un poco para delante. Sobre el depósito encontramos un reloj al más puro estilo custom, con un velocímetro con cuentarrevoluciones y ordenador de a bordo.
Al arrancarla el sonido es más que aceptable, eso si, siempre cumpliendo las normativas exigidas legalmente. El escape lleva colectores cromados de doble pared en acero inoxidable 2 en 1, en 2, con catalizador común de gran volumen y silenciadores cromados.
El comportamiento en carretera es muy satisfactorio gracias a un par impresionante, óptima para perderte en carreteras de curvas siempre que no sean demasiado ratoneras pues notarás el roce de los avisadores de los estribos con bastante frecuencia. Con muy buena aceleración, se comporta de manera suave pero poderosa si le “retuerces la oreja” en cualquier situación. La amortiguación cumple su cometido pudiendo regularla según la carga. Tras un día rutero queda muy buen sabor de boca.
Entre las características a destacar contamos con el depósito con capacidad para 22 litros de combustible que te da una autonomía bastante aceptable de aproximadamente unos 300 kilómetros. También la incorporación de transmisión por correa de bajo mantenimiento, que proporciona una entrega de la potencia de forma suave y limpia y el ABS son puntos fuertes de la Storm. El vehículo probado montaba frenos Brembo y neumáticos Metzeler Marathon; ambos nos han ofrecido unas magníficas prestaciones.
Otro dato a tener en cuenta es la información que ofrece la moto: el velocímetro montado sobre el depósito incluye un pequeño cuentarrevoluciones integrado y ordenador de a bordo con reloj, doble cuentakilómetros parcial e indicador de combustible.
En el apartado técnico, la Triumph Storm lleva un motor bicilíndrico de 1.700 cc en paralelo con refrigeración líquida y doble árbol de levas en culata con casi 100 CV de potencia a 5.200 rpm y un par de 156 Nm a 2.950 rpm. Con estas cifras, el consumo urbano se sitúa en 6,3 litros cada 100 kms. y a 120 Km/h 5,8 litros a los 100.
Esta motorización se monta sobre un bastidor de acero tubular de doble viga con basculante de doble brazo en tubo de acero. Las ruedas llevan llantas de aleación de aluminio de 5 radios con neumáticos de 120/70 R19 y 200/50 R17 detrás. La suspensión delantera es mediante horquillas Showa de 47mm y 120 mm de recorrido y las traseras con doble amortiguador Showa con muelles ajustables en precarga de 5 posiciones y con 95 mm de recorrido de rueda. Para frenar esta moto de 339 kg se cuenta delante con doble disco de 310 mm y pinzas Nissin de 4 pistones y detrás con un disco de 310 mm con pinza flotante Brembo de 2 pistones.
El precio de esta impresionante motocicleta británica es de 15.495 euros ó 16.195 si la queremos con ABS, extra que desde aquí recomendamos pues si evitamos con ello una caída, ya habremos compensado su incremento de precio en la compra.
Por último decir que la casa Triumph dispone de una gran cantidad de accesorios para darle ese toque personal tan buscado en las motos custom. La marca Triumph ha incorporado a su web un configurador de nombre “create my triumph” donde puedes elegir entre toda la gama de accesorios y ver como quedan sobre tu moto.
Vestuario de la prueba:
Casco NZI Convert III
Guantes Hebo Intercity
Chaqueta Hebo Softshell lux
Galeria de fotos: