Este invierno los poseedores de un Citroën C5 de última generación lo tendrán más fácil. El modelo francés incluye en su equipamiento de serie el Control de Tracción Inteligente (excepto las versiones con cambio automático) que optimiza el antipatinaje ASR. El sistema evalúa diferentes parámetros como el grado de inclinación o el tipo de superficie y permite una mayor tracción según sea posible. Esta mejora se hace especialmente evidente con un juego de neumáticos de invierno, mejorando el comportamiento en la salida de las curvas y por tanto en el timing de la aceleración.