Fernando sustituirá, como era obvio, a Kimi Raikkonen y formará equipo con Massa para el 2010 una vez que el brasileño se recupere totalmente de sus heridas de Hungría. Con el apoyo del Banco de Santander cerrado hace semanas, el paso de Alonso a Ferrari estaba aun más consolidado, es lógico, el banco español estuvo presente en la operación con McLaren y aunque no pudo marcharse con nuestro piloto por cuestiones de contratos, ahora esperamos que esta unión con Ferrari si sea la buena y fructifique con grandes éxitos para todas las partes. Tres años de contrato, 25 millones de Euros de sueldo, Mutua Madrileña de nuevo con él, son los detalles más importantes, pero lo mejor de todo es que vuelve a un equipo siempre obligado a ganar, su historia solo se entiende de esta forma, con presupuesto casi ilimitado y si algo no ha perdido dentro del lujo de la Formula 1 Alonso, es su ansia de mejorar y ganar en cualquier circunstancia, peleando hasta el final aunque sea un mísero punto. Esperemos que alguno de los defectos que le alejaron de los principales equipos, y que le granjearon mala fama entre los jefes de equipos hayan desaparecido o atenuados después de las experiencias vividas años atrás.
Toda la Scudería está esperando con ansia la llegada de Alonso, una persona radicalmente distinta a Kimi con quien las relaciones de mecánicos e ingenieros estaban absolutamente rotas. Su falta de interés por el desarrollo del monoplaza, el poco feeling con los aficionados o la falta de formalidad en las tareas propias de promoción, son lo que el equipo espera recuperar con nuestro piloto. Italia, donde Ferrari es más que un coche, ha recibido con esperanza la noticia, ilusión que a poco que vayan bien las cosas puede volver a cotas que no se recuperaron con la marcha de Schumacher. El coche este año ha recuperado con el paso de las carreras la competitividad que no tenía al principio, pero no ha sido suficiente para ganar carreras, y ya solo se piensa en el año que viene donde se retomará con renovados ánimos la competición.
El asturiano será el tercer piloto español en un Ferrari, uno de momento sigue sentado en ellos, Marc Gene y otro Alfonso de Portazgo, hace ya décadas dentro de la pre-historia de la F1, que solo pudo disfrutar de pertenecer al equipo unas pocas carreras hasta su fatal accidente en la 1000 Miglia de 1.957.
Solo queda ver si existe la posibilidad de ver a Fernando antes de terminar la temporada en el monoplaza rojo, o al menos que no pase lo mismo que con McLaren al que Renault vetó su paso hasta finalizar el año 2006, retrasando su adaptación a mecánica o equipo. Con los test reducidos por reglamentación en este caso es aun más importante que en aquel momento. La situación interna de la escudería francesa puede en este caso ayudar y las próximas semanas iremos sabiendo más detalles importantes para esta unión.