– 4,21 m de largo, ancho de 1,77 m, alto 1,40 m. y 1.455 kg de peso
– Potente motor turbo con inyección directa de 265 CV
– Caja de cambios manual de seis marchas de transmisión corta
– Tracción integral quattro a las cuatro ruedas
El S3 es un vehículo muy deportivo. Acelera de 0 a 100 km/h en 5,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h (limitada). Con una asombrosa facilidad de giro y un sonido muy bonito, el potente cuatro cilindros de dos litros con inyección directa de gasolina FSI y sobrealimentación turbo demuestra ser un ágil motor de alto rendimiento. Además las sensaciones se las quedan quienes viajan en el coche. Por fuera no es nada ostentoso o llamativo, podría pasar por un vehículo normal si no nos fijamos mucho. Esto es de agradecer por quienes no quieren llamar la atención y prefieren lo sencillo y elegante. Pero vayamos a su principal cualidad: la conducción y la potencia. La fuerza es transmitida a las grandes llantas de aluminio de 18 pulgadas de diámetro a través de la caja de cambios de 6 marchas y de la tracción integral permanente quattro. La sensación al conducirlo es, por un lado, que viajas en una berlina de lujo. Hay muchos detalles en el interior (comúnmente llamados “extras”) que nos acomodan la vida a bordo. Todos ellos con un espíritu deportivo. Valgan como ejemplos los pedales, el pomo de la palanca de cambio y las salidas de aire que se han diseñado en aluminio. También los asientos, estilo baquet de coche de competición. Por otro lado lo importante, esa sensación de potencia, de agarre, de ser una “bestia” sin control pero a la que dominamos fácilmente. Esas sensaciones son las que, sin duda, definimos como “Objeto de deseo”, o como dirían los expertos de marketing, “vehículo aspiracional”.
Exteriormente la imagen del deportivo de tres puertas muestra una parrilla del radiador de una sola pieza con moldura cromada, faldón delantero con un spoiler con grandes entradas de aire; estribos laterales, faldón trasero con un difusor en color gris platino y, a la izquierda, dos tubos de escape ovalados en el típico color cromado de los modelos S. La imagen exterior viene además realzada por los retrovisores en diseño de aluminio y el spoiler de techo en el mismo color de la carrocería. Respecto a su hermano A3, los muelles y los amortiguadores se han ajustado de forma más rígida, siendo el S3 25 mm más bajo que un A3 con tren de rodaje de serie.