Para esta carrera todas las miradas estaban puestas en Jayo-Cruz, pues sus posibilidades de ganar el titulo pasaban por la victoria en casa, algo no demasiado descabellado, además Climent y Puras también debían mantener el tipo, si bien el valenciano del Subaru lo tenia un poco más complicado, pues para estar con opciones solo le valía una victoria. Además las miradas estaban puestas en Blázquez, que convaleciente del accidente del Príncipe de Asturias, y aun sin estar al cien por cien quería defender su privilegiada posición al frente del Cto.
Con todos estos alicientes y con un montón de añadidos de cara a la victoria de la prueba se iniciaba la carrera. Ya en el primer tramo Jayo-Cruz demostraban estar en forma y se llevaba el scratch por delante de Climent-Romani, Puras-Martí y Cañellas-Sanchís todos en 7 sg., mientras que el ganador del año pasado aquí, Alberdi decía adiós a la prueba en el primer enlace.
Pero en el tercer tramo iba a saltar una doble sorpresa, por un lado Roca-Julia se llevaban el scratch por delante de gente mucho más experimentada a bordo de un WRC, y por el otro el Focus del Junior Team llegaba muy retrasado, la razón, un vuelco que le hacia perder casi un minuto y toda opción a la ansiada victoria.
La lucha por la cabeza se centraba en dos nombres Puras y Climent, pues Cañellas no podía mantener el ritmo de cabeza, Solá perdía tiempo con unos diferenciales defectuosos y Blázquez hacia lo que podía con sus dolores. Pero poco después el valenciano Climent perdía en el tramo cuatro, más de 20 sg. con problemas con el cambio, por lo que el cantabro del Toyota se quedaba en cabeza, realizando una carrera impecable y muy muy rápida. Pero a falta de dos tramos cuando todo parecía estar decidido, la torilla daba la vuelta y era Puras el que perdía casi medio minuto con un pinchazo, por lo que Climent-Romani volvían al liderato como recompensa a sus tres scratch consecutivos a la caza y captura del Corolla. El ultimo tramo se limito a dar honor a los dos animadores de la carrera, y ha quitárselo a Roca y Huete, ambos autores de una buena carrera se salían en el mismo sitio, quedando amontonados los dos Cordoba WRC, a consecuencia de ello se neutralizo el tramo, un final triste para un rallye pletórico de emoción.
De esta forma la victoria de Climent-Romani les devuelve a la lucha por el titulo, Puras-Martí segundos mantienen sus opciones. Terceros en el rallye, Solá-Moreno que aventajaban a sus compañeros de marca Cañellas-Sanchís y Blázquez-Mercader que sumo unos puntos importantes para llegar al sprint final bien colocado, por delante de un desolado Jayo que decía adiós a su posibilidades.
En 2RM el temprano abandono del andorrano Vinyes dejaba el camino expedito a Jiménez-Pujol que gracias a este resultado también se jugaran el titulo en la ultima cita.
Parecía que ya lo habíamos visto todo en la Copa Ibiza, pero una vez más las carreras nos sorprendieron. Villanueva-Jiménez esperaban rematar la faena y proclamarse campeones de la Ibiza, pero el destino les estaba esperando con otro final, su embrague con problemas “dio la lata” más de lo escrito en el guión, e incluso acabo con el Ibiza apartado en una cuneta, lo que pone aun más emocionante la Copa.
La prueba resulto un mano a mano entre Santalla-Avila y Salat-del Moral, pues con el de BOYACA fuera de la pelea y con Quesada-Amblas un poco flojos al principio, solo unos inspirados Pérez-Marcos se acercaban a la lucha, pero la carrera empezó a dictar su ley, y estos fueron los primeros en caer al comenzar la segunda vuelta una leve salida les dejaba tocada una transmisión que se rompería en el siguiente tramo hundiéndose en la clasificación, Quesada reaccionaba y se acercaba a los lideres, pero el tiempo perdido al principio era definitivo, solo quedaba esperar acontecimientos, y vaya si los hubo, pues Santalla y Salat se lo jugaban todo en el ultimo tramo, el catalán fue a por todas y se salió rompiendo sus dos transmisiones al intentar sacar el coche, diciendo adios a la carrera y a sus posibilidades de titulo. Santalla-Avila conseguían la victoria por suma de tiempos, pero un atasco de vuelta a Guernica les volvía a dejar con “la miel en los labios”, pues una penalización les relegaba a la segunda plaza. Quesada-Amblas de esta forma se encontraban con una victoria que sumada al abandono de Salat les deja como únicos oponentes a los madrileños en la lucha por la Copa. Bruguera-Pare sorprendidos por tanto abandono y acontecimiento al final se subían al podium, por delante de Moreno-Gómez y de Forné-Ricarte.